Terreno espinoso es el de los medios de comunicación “alternativos” (palabra que al compañero Joan no le gusta y con razón).
Éstos surgen de una necesidad: la democratización del espectro comunicativo y social. Y como consecuencia de un descontento social con: los medios de comunicación de masas (basados en el modelo de propaganda de Noam Chomsky).
La clave, la base y la iniciativa están en la Red: que responde a una estructura social sólida, facilita el acercamiento de los grupos sociales y promueve la participación y el compromiso.
Estos tres elementos: red, comunicación y participación (y las nuevas tecnologías en general) son los ejes de los que se sustentan este tipo de nuevos medios que han generado un cambio en el modelo comunicativo dominante y que pretenden garantizar la expresión plural de la sociedad.
Muy bien hasta aquí. Sin embargo, como mencioné al principio esto es un terreno espinoso por varios motivos:
- Unos se plantean la legitimidad de las relaciones sociales en la red ¿tienen el mismo valor que las que se generan “en la realidad” (por señalar una distinción?
- Estos nuevos medios o formas de informar, ¿de qué lado dejan a los periodistas formados? ¿Los periodistas ya van parejos a los denominados medios dominantes? Y el también llamado periodismo ciudadano, ¿qué lugar ocupa en este debate?
Aquí dejo estas preguntas para la libre opinión…. Pero tal y como estamos avanzando, en cuanto a medios, en cuanto a redes sociales, en cuanto a todo, se hace necesario, cada vez más, un mecanismo de regulación del “todo vale”.
Éstos surgen de una necesidad: la democratización del espectro comunicativo y social. Y como consecuencia de un descontento social con: los medios de comunicación de masas (basados en el modelo de propaganda de Noam Chomsky).
La clave, la base y la iniciativa están en la Red: que responde a una estructura social sólida, facilita el acercamiento de los grupos sociales y promueve la participación y el compromiso.
Estos tres elementos: red, comunicación y participación (y las nuevas tecnologías en general) son los ejes de los que se sustentan este tipo de nuevos medios que han generado un cambio en el modelo comunicativo dominante y que pretenden garantizar la expresión plural de la sociedad.
Muy bien hasta aquí. Sin embargo, como mencioné al principio esto es un terreno espinoso por varios motivos:
- Unos se plantean la legitimidad de las relaciones sociales en la red ¿tienen el mismo valor que las que se generan “en la realidad” (por señalar una distinción?
- Estos nuevos medios o formas de informar, ¿de qué lado dejan a los periodistas formados? ¿Los periodistas ya van parejos a los denominados medios dominantes? Y el también llamado periodismo ciudadano, ¿qué lugar ocupa en este debate?
Aquí dejo estas preguntas para la libre opinión…. Pero tal y como estamos avanzando, en cuanto a medios, en cuanto a redes sociales, en cuanto a todo, se hace necesario, cada vez más, un mecanismo de regulación del “todo vale”.